Vértigo Posicional
El vértigo posicional paroxístico benigno (VPPB) es el vértigo periférico más frecuente. El paciente experimenta un vértigo rotatorio muy intenso, que dura segundos, desencadenado por movimientos posicionales repentinos (como darse la vuelta en la cama, o levantar la cabeza y mirar hacia arriba al poner una toalla en un armario).
El inicio de la enfermedad es muy intenso, como estar en un carrusel, la persona se despierta y presenta vértigo, y se sienta en la cama. La sintomatología dura unas semanas. La enfermedad desaparece, pero reaparece al cabo de un tiempo.
Algunas personas se quejan de una sensación de presión en la nuca, o de estar en las nubes, y adoptan una posición robótica, tratando de moverse lo menos posible, para no desencadenar el vértigo.
El paciente se cura al cabo de unos días. Se cura realizando maniobras (Epley), que consisten en reposicionar las otoconias en su sitio.
Los ejercicios de fisioterapia adaptados por Brandt y Daroff suelen curar el Vértigo Posicional.
Como se indica en la imagen siguiente, siéntese en el borde de la cama y túmbese de lado en el lado que desencadena el vértigo. Permanezca en esa posición hasta que el vértigo desaparezca por completo, luego siéntese de nuevo, lo más rápido posible, y acuéstese lateralmente en el lado opuesto. Cuando los síntomas desaparezcan, puede volver a sentarse y reiniciar la maniobra, hasta un máximo de 5 veces.
Haga este ejercicio dos veces al día. En la mayoría de los casos, el vértigo desaparecerá en pocos días.