Por qué dormir bien es de vital importancia Si tienes problemas para dormir, probablemente has notado una incapacidad para concentrarte a lo largo del día. Eso significa que puedes experimentar una mayor irritabilidad y sufrir dolores de cabeza debido al agotamiento. Estos síntomas son difíciles de ignorar si estás intentando ser productivo y pueden provocar agotamiento mientras trabajas. También pueden repercutir gravemente en tu salud mental y física. No dormir bien puede ponerte en riesgo de padecer varias enfermedades graves, como las cardiovasculares, la hipertensión y la diabetes de tipo 2. Por suerte, hay varias formas de evitarlo: Tu dieta puede mejorar tu ciclo de sueño Lo que comes a lo largo del día puede influir en cómo duermes por la noche. Hay muchos ajustes en la dieta que se puede hacer para mejorar el ciclo de sueño. Tomar pequeñas medidas como limitar la cafeína, mantenerse hidratado con agua y cenar más temprano puede ser clave para que tu cuerpo esté listo para ir a la cama. Los estudios han demostrado que alimentos como las almendras, que contienen melatonina, son un gran aliciente antes de acostarse. Bebidas como el té de manzanilla pueden mejorar la calidad del sueño. Otros alimentos y bebidas que contienen propiedades que favorecen el sueño son los plátanos, la avena y los productos lácteos como la leche. Hacer ejercicio es crucial Comprometerse a hacer ejercicio puede ayudarte a dormir mejor. Cuanto más activo se mantenga tu cuerpo, más necesitarás dormir. Los estudios han demostrado que quienes hacen ejercicio han disminuido su insomnio. Un estilo de vida activo también puede ayudarte a perder peso, y eso implica disminuir el riesgo de padecer trastornos del sueño como la apnea del sueño. Algunos ejercicios habituales para mejorar el sueño son aeróbicos, yoga y entrenamientos de fuerza. Se ha comprobado que todos ellos reducen el insomnio, relajan el cuerpo y ayudan a conciliar el sueño más rápidamente. Meditar también es una herramienta crucial para regular el cuerpo y relajar la mente Meditar antes de acostarse puede ayudarte a preparar tu cuerpo para el sueño. Puede ser una herramienta útil para añadir a tu rutina antes de acostarse para asegurarte de que tu cuerpo está totalmente preparado para dormir mejor. Evita las pantallas antes de acostarse Utilizar el teléfono demasiado tiempo antes de acostarse puede afectar al sueño. Mirar fijamente una pantalla y estimular el cerebro puede afectar al sueño REM. Hacerlo puede mantenerte despierto durante horas y afectar a tu ciclo de sueño. La luz brillante del teléfono también puede afectar al sueño y a la vista, afectando a tu reloj corporal interno y alterando tu ritmo de sueño. Se recomienda dejar de utilizar el teléfono una o dos horas antes de acostarse para preparar el cuerpo para descansar. Si estos pequeños cambios en tu rutina no te ayudan, es posible que haya otros problemas que te estén afectando. El Dr. Castrillón tiene todas las herramientas para ayudarte a diagnosticar el problema y tratarlo eficazmente. ¡Dormir mejor es posible! Solicita tu cita en el Centro Médico Picasso por WhatsApp,página web o teléfono. Fuente: BREATHE CLEAR INSTITUTE
Consejos para dormir mejor