Si tienes secreción nasal o picor de garganta constante es posible asumir que estos síntomas son solo de un resfriado habitual. Sin embargo, aunque muchos de estos síntomas se atribuyen al resfriado común, otras afecciones podrían tener consecuencias más graves si no se tratan. Si tienes alguna de estas cinco señales de advertencia en la zona del oído, la nariz o la garganta, es importante acudir a un otorrinolaringólogo lo antes posible. En este artículo se describen cinco posibles señales de alarma de problemas de oído, nariz y garganta. Molestias en el oído o secreción El dolor de oído o la secreción son indicadores cruciales de una infección bacteriana o viral. También pueden ser el resultado de una reacción a un medicamento. No se debe ignorar ningún dolor de oído, ya que puede indicar una afección más grave. No hay que preocuparse, este tipo de infecciones son muy comunes y pueden tratarse con antibióticos. Sin embargo, ignorar el dolor de oído y la secreción puede dar lugar a una infección más grave y puede requerir tratamiento adicional o cirugía. Si experimentas un aumento repentino de la secreción del oído y notas algún dolor, puede deberse a una infección de oído que requiere antibióticos. Irritación nasal La irritación y la congestión nasal son signos de un resfriado, pero también pueden ser una señal de advertencia de algo más grave. Si experimentas irritación nasal, hinchazón o drenaje en los conductos nasales, es posible que tengas una infección bacteriana o viral en los senos paranasales. Si no se trata, esto puede dar lugar a complicaciones e incluso a una infección más grave, como la meningitis bacteriana. Si experimentas irritación e hinchazón nasal, es importante que acudas a un otorrinolaringólogo para que evalúe los síntomas y te haga pruebas para detectar infecciones bacterianas o víricas. Limpieza constante de la garganta y tos Si estás resfriado, es posible que experimentes picor de garganta o tos, pero si la irritación persiste o empeora, es posible que tengas una infección más grave, como una faringitis estreptocócica o una amigdalitis bacteriana. Si tienes picor de garganta y tos con mucosidad espesa o fiebre, debes acudir a un otorrinolaringólogo lo antes posible. Toser con mucosidad espesa o tener un picor de garganta constante puede deberse a una infección en la garganta, que puede ser grave si no se trata. La tos y el carraspeo son formas en que el cuerpo intenta eliminar una infección, como la faringitis estreptocócica o la amigdalitis bacteriana. Cualquier tipo de infección de garganta puede provocar complicaciones. Pueden ser necesarios los antibióticos. Dificultades auditivas Es habitual que las personas experimenten dificultades auditivas cuando están resfriadas. Sin embargo, si experimentas una pérdida de audición repentina acompañada de fiebre, es posible que tengas una infección bacteriana en los oídos. Si experimentas una pérdida de audición repentina, debes visitar a un otorrinolaringólogo lo antes posible y determinar rápidamente cuál es la causa del problema, ya que las infecciones bacterianas en los oídos pueden extenderse a otras partes del cuerpo. Goteo nasal El goteo nasal es un síntoma común de un resfriado, pero si persiste durante más de unas semanas o sus síntomas empeoran, puede indicar una afección subyacente como alergias o una infección de los senos paranasales. Si los senos paranasales están infectados, pueden drenar hacia las fosas nasales y provocar un goteo nasal que dure más de dos semanas. Si tienes una infección de los senos paranasales, puedes experimentar congestión nasal, fiebre y una secreción nasal espesa, amarilla o verde. Si experimentas alguno de estos cinco síntomas, es esencial que visites al Dr. Castrillón lo antes posible. Las zonas del oído, la nariz y la garganta son muy sensibles y las infecciones pueden tener importantes complicaciones si no se tratan. Solicita tu cita en el Centro Médico Picasso por WhatsApp, página web o teléfono. Fuente: CHICAGO ENT
Advertencias comunes para acudir a un Otorrino